Patrimonial. El sector de calle Arturo Prat y Pasaje Plutón en lo alto de Cerro Alegre es Sitio Arqueológico de la Cultura Llolleo (200-1100 dC). Allí se encontraron a principios de la década de 1990, durante la construcción de una casa, restos de individuos de esas antiguas poblaciones que habitaron la Quebrada Los Perales (sector Puente Colgante), que en tiempos prehispánicos era un fértil bosque nativo con recurso de agua pura de vertiente.
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Cuanta historia hay en esta fotografía de 1960 con recordados protagonistas del desarrollo de San Antonio en el siglo XX. De pie (izq a der): José Mallol (de Zapatería Mallol), Manuel Blanco (Pesquera Arauco), Jesús Peña (Zapatería Denia), Luis Monasterio (Tienda El Pilar), Carlos Iglesias (agente de aduana), Fernando Martínez (Ferretería y Barraca Martínez). Abajo (izq a der): Benjamín Blanco (CCU), Juan Gaiche (Almacén El Tropezón), Carlos Lacalle (Casa El Gallo), Jesús Cabrero (Ferretería El Globo), José Martínez (distribuidor de Viña Concha y Toro).
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Fue gran amigo de nuestra Biblioteca Pública. Se le considera fundador del Museo de San Antonio al profesor y coleccionista Pedro Ramírez Fuentes. Nació en Victoria el 16 de febrero de 1928, luego su familia se trasladó a Chillán. Realizó su Bachillerato en Biología y Química. Una vez titulado de Profesor Normalista, empezó a trabajar en la Escuela Granja de Doñihue (Rancagua), dos años después se trasladó a Talca como director de una escuela. Tres años después se mudó a Llolleo con su familia. Fue profesor en la Escuela 1, Instituto Comercial, Colegio Sara Cruchaga y Liceo Santa Teresita. Posteriormente se le modifica el grado nombrándosele Supervisor de Ciencias Naturales en la Dirección Provincial de Educación. A fines de la década de 1970 las arqueólogas María Teresa Planella y Fernanda Falabella realizaron investigaciones en la zona para desarrollar su Tesis de Pregrado “Curso inferior del Río Maipo: evidencias agroalfareras”, que destacaba el valor del Complejo Cultural Llolleo, la Cultura Aconcagua y el Horizonte Cultural Bato. Ellas contactaron a Ramírez Fuentes que por su cargo había supervisado hallazgos arqueológicos en la provincia. Surgió la idea de exhibir el material a la comunidad. Fue la génesis del museo que abrió un 10 octubre de 1980 con colecciones de entomología donadas por Ramírez y material de la Cultura Llolleo en dependencias de la antigua Casa de la Cultura de Avenida Barros Luco 2347, Barrancas. Un 16 de julio de 1981 un decreto municipal nombra a Pedro Ramírez Fuentes en cargo Ad Honorem como primer Director y Conservador del Museo Municipal de San Antonio. Ramírez Fuentes jubiló en 1993 y regresó a Chillán, donde gesta la creación en 2004 del Museo de Ciencias Naturales de esa ciudad que hoy lleva su nombre. El profesional fallece en marzo de 2015. Fue despedido con gran pesar y se le recuerda como un hombre sabio, que puso su conocimiento al servicio de la comunidad.
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