Fomento lector Biblioteca de Barros Arana

Borges dijo que “la felicidad, si se es lector, es frecuente” y confesó que estaba más orgulloso de los libros que había leído que de aquellos que había escrito. Muy bien, convengamos que Borges no sería quién fue si sólo hubiese sido lector, pero sí podemos afirmar que nunca hubiese sido tan fascinante escritor de no haber leído.


El hábito de la lectura nos entrena, en una primera aproximación, para expresarnos mejor. En lo concreto, nos acostumbra a la correcta ortografía y gramática y amplía nuestro vocabulario. Pero además, desarrolla la imaginación y la creatividad, aumenta la capacidad de memoria y ejercita la concentración. "Abre nuestras mentes más allá de lo que nos rodea".


 Leyendo, aumentamos nuestra cultura general y nuestra autoestima. También, aprendemos a relacionarnos mejor con el resto de las personas: de a poco descubriremos que nos es más sencillo ponernos en el lugar de los demás y analizar las situaciones desde otro punto de vista. Podremos experimentar con nuestras propias emociones al “visitar” con la lectura situaciones que no necesariamente podríamos experimentar en carne propia: terminaremos, inevitablemente, ampliando nuestro abanico emocional.  


 María del Mar